A veces creemos que al comprar sábanas sólo se debe ver la cantidad de hilos que contiene, entendiendo que sólo en ese se basa la calidad de una buena sábana. Pues te cuento que ese ha sido un error que hemos tenido en mente desde hace un buen tiempo. ¡Vamos a romper el mito!
No se trata de la cantidad, sino de una combinación entre cantidad y material. La calidad de la sábana se determina por el tipo de material que tenga, por ejemplo, una sábana de 300 hilos de algodón 100% es de mejor calidad que una sábana que tenga 600 hilos de poliéster.
También existen las que son combinadas 50% y 50% salen buen precio y tienen buena calidad. Aquí te cuento aquí cuáles son los tipos de materiales, sus ventajas y desventajas, así, en tu próxima compra, ya sabrás en que debes fijarte y cual adquirir.
Algodón
El material más recomendado por su calidad.
Ventajas: proviene completamente de fibras naturales, no contiene nada de químico, por ende, es antialérgico, de fácil lavado, resistente, anti-peeling lo que quiere decir que no forma grumos con el constante uso y lavado. Además, se adapta a las temperaturas, es decir, si hace calor es fresco, si hace frio es calientito. Existen de todos los precios.
Desventajas: Se encogen con el tiempo y se arruga con facilidad.
Sábanas de seda
Ventajas: Ayuda a que la piel se sienta suave, absorbe la humedad y es hipo alergénico.
Desventajas: El lavado debe ser delicado o más bien a mano, al ser tan suaves puede quebrarse en la lavadora, además de ser muy costosas, este material no le agrada a todo el mundo porque se siente resbalosa.
Sabanas de Poliéster
Ventajas: Es un material duradero, se mantiene en buen estado por mucho tiempo y además, es resistente a las arrugas. El precio es económico, por lo que precio – calidad estarán muy bien.
Desventajas: Es una fibra sintética, creada por el hombre, lo que no la hace natural, no es tan fresca como el algodón y no transpira.
